martes, 14 de diciembre de 2010

Adiós Invierno…

Escucho, vacíos que aclaman libertad,

pensando silencios, estuvo tu voz en mí,

recuerdos son sueños que viven en soledad.


Tristezas, auguran los gritos de ansiedad,

yo grito, te imploro que el ángel llegue aquí,

te busco, no te hallo esto es una ambigüedad.


Camino en el frío, le llamo no responde dónde está,

su voz se esconde pero una mano calor me da,

descubro soñarle en medio de la nada él está.


Sus besos son como los dulces que un niño pedirá,

sus ojos brillan como estrellas que viven la eternidad,

su cuerpo al tacto con el mío  en un abrazo nos fundirá.


Susurros encantos, sonidos que emiten de tu boca,

murmullos que vuelan como mariposas,

mientras tus besos derriten a los míos cuando los toca.


Feliz ahora porque has llegado en el momento más ausente,

en la hora y en el lugar donde te llamaba frecuentemente,

ahora por fin puedo abrazarte ahora te veo y estas presente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario